JANO, con sus dos rostros mirando a la vez a derecha e izquierda es un símbolo de la totalización, de anhelo de dominación general. Desde la más antigua tradición romana, Jano se veía en la entrada de todas las puertas, presidiendo todas las entradas.
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Fernández Pastorino, A. (Personal Name)
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- Monografías jurídicas ; no. 66
DERECHO
